Freud hizo un gran y maravilloso esfuerzo al escribir “Moisés y la religión monoteísta”, probablemente porque era un tema muy relevante para él. Es un texto que reúne los planteamientos de los anteriores textos sociológicos, un trabajo de análisis y elaboración cultural del pueblo judío. En tiempos de guerra y persecuciones, preocupado por lo que le tocaba vivir en la sociedad de esa época, su esfuerzo parece haberse dirigido a develar la función de las religiones en los procesos de evolución de las sociedades.
En el segundo capítulo de este escrito, establece una comparación entre la evolución del pueblo judío con el griego, mostrando como el segundo recurrió un camino desde el politeísmo, la mitología, la poesía con sus relatos épicos, como la Ilíada de Homero, hasta la filosofía, a diferencia del pueblo judío que cursa un proceso de trauma colectivo, con sus intentos de resolución basados en la repetición de la escena traumática.
Recopila información arqueológica y reconstruye la novela familiar del Mesías, de Moisésy especula hechos históricos, presentados como indicios y pruebas que pertenecen al orden del método de trabajo de la arqueología, acercándolos al método de trabajo analítico.
Es un relato fascinante de una posible historia de la civilización judeo cristiana, una propuesta de una reconstrucción psicoanalítica, que da cuenta de mecanismos de elaboración colectivos, de los dinamismo de la memoria colectiva, de sus censuras o desinformaciones, de las posverdades de esas épocas y las posteriores, de las noticias falsas que sirvieron para escribir esta historia particular. Desde la novela familiar del neurótico, del héroe, construye la novela de un pueblo que lucha por la construcción de su identidad y por salvaguardar su creatividad, a través de revoluciones culturales y religiosas, representadas por distintas tipos de deidades, como expresión de su temores y conflictos.
Es un texto que nos invita a pensar en los procesos sociales desde una perspectiva que nos permite ampliar la comprensión de estos fenómenos, al modo de Freud.
Ps. Carolina Bórquez
Psicoanalista APSAN
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