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DORMIR, SOÑAR: Evolución biológica y raíces freudianas.


A. Evolución biológica.


Muchos seres vivos, incluso simples, necesitan un período de inactividad. Con el desarrollo neuronal este período se transforma en el dormir y, en algunos más complejos, con actividad onírica. Todos los reptiles, los mamíferos y los pájaros, así como las moscas y los cangrejos manifiestan dos estados neuronales claramente distintivos, el de la vigilia y el del sueño de onda lenta. Durante la vigilia, predan, se escapan, copulan. Durante el sueño de onda lenta, se establece un estado de quietud, se apagan los sentidos y las acciones motoras. De todos ellos, los mamíferos, los pájaros y los cocodrilos, tienen además, insertado en el proceso onírico, un ciclo de sueño REM. En pájaros y cocodrilos, estos episodios duran apenas unos segundos, en los mamíferos, hasta alrededor de una hora.(Sigman, doctor en neurociencias)

Como menciona Ribeiro (2004), el sueño de ondas lentas comenzó a aparecer en el período Carbonífero, hace unos 360 millones de años, época de migración de los vertebrados desde el agua a las tierras secas. No sólo influye en los procesos de conservación de energía y de recambio metabólico sino que además en el importante proceso de aprendizaje a través de la amplificación y consolidación de memorias., es decir, promoviendo el aprendizaje por repetición.


El soñar juega un papel en formas de aprendizaje complejas como el insight, proceso creativo que tiene como uno de sus materiales los recuerdos preexistentes. No solo se da en humanos, también en delfines, chimpancés, cuervos, ratas.

(Ribeiro, 2004)


B. Evolución psicológica. Freud y el soñar.


Desde hace miles de años el recuerdo del producto de la actividad onírica, que comúnmente llamamos "sueño", ha sido objeto de interés y de interpretación para los seres humanos. Al inicio de la teoría psicoanalítica, Freud los investiga e interpreta como un modo de realizar hipótesis en relación con la vida psíquica del soñante, basado en la teoría que la mente funciona determinada y hacia un sentido, cosa que podía observarse en síntomas psicopatológicos. Por ello señala que el sueño es un producto de la actividad psíquica que tiene un sentido como lo tienen otros, tales como los síntomas histéricos u obsesivos, es decir, el sueño deriva de ciertas representaciones a las cuales se puede llegar a través de un método científico de interpretación de ese producto. (Freud, 1899)


En la vigila el deseo es la matriz de la motivación y del proceso mental, a través de lo cual busca su realización en pensamientos, fantasías (interna) o en acciones (externa). Freud señala que los pensamientos oníricos, producto del trabajo del soñar, siempre figuran un deseo como cumplido (v.g. necesidades insatisfechas). De esta manera esencialmente el sueño “es el cumplimiento (disfrazado) de un deseo (sofocado, reprimido)” (Freud, 1899)

En "La Interpretación de los Sueños" Freud señala cuatro factores centrales en el trabajo del soñar:

A. La Condensación.

Implica que los elementos del sueño aparecen sobredeterminados, hay puntos nodales y con carácter multívoco para la interpretación. Estas deformaciones léxicas podemos encontrarlas también en las neurosis histéricas y obsesivas y en la paranoia. (Freud, 1899)


B. Desplazamiento. (Descentramiento)

Por la influencia de la censura, en el trabajo onírico ocurren transferencia y desplazamiento de intensidades psíquicas de los elementos singulares de los pensamientos oníricos y que producen sobre determinación de algunas representaciones de valor menor mientras que devalúan otras de mayor valor, de manera que éstas pueden aparecer “descentradas”, ocupando un rol secundario en el contenido manifiesto. (Freud, 1899)

C. El miramiento por la Figurabilidad.

Consiste en el desplazamiento del valor psíquico desde aquellas representaciones más abstractas a las más concretas (p.e. imágenes visuales, un chiste, citas, canciones, proverbios, símbolos), condición ésta que permite una cantidad mayor de contactos e identidades con el resto del material onírico, colaborando a la condensación del material onírico. Ocurre también con el material reprimido en las alusiones, los chistes, en las fantasías neuróticas, en los símbolos (p.e. material sexual). (Freud, 1899)

D. La Elaboración Secundaria.

Significa la elaboración del sueño como una vivencia inteligible y coherente (como lo hace el pensar preconsciente) a través de la operación de conexión de fragmentos del material onírico realizada por la censura. (Freud, 1899).








Dr. León Cohen

Psicoanalista APSAN-IPA










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